Educación Montessori y Waldorf para niños de 0 a 4 años

Ximhai

Donde cada niño es un universo por descubrir.

En XimHai creemos que la infancia es sagrada: es el momento donde se siembran las raíces del ser, del amor propio, de la creatividad y de la consciencia. Acompañamos a niños y niñas desde los 4 meses hasta los 4 años en un entorno seguro, amoroso y lleno de respeto por su individualidad.

Aquí, cada pequeño aprende a su propio ritmo, en libertad, rodeado de cariño y acompañado con presencia. Nuestra misión es guiar con el corazón, respetando la autonomía de cada niño, fomentando la inteligencia emocional, y sembrando la semilla de una vida plena y conectada con el mundo.

Te invitamos a conocer este espacio creado con amor, pensado para formar seres humanos felices, empáticos, independientes y profundamente conscientes.

XimHai no es solo un kínder. Es el inicio de una vida con propósito.

Nuestra Misión

Nuestra Filosofía

En XimHai, creemos que cada niño es un ser completo desde el nacimiento, con su propio ritmo, su luz y su universo interior. Nuestra filosofía se inspira en enfoques pedagógicos como Montessori, Waldorf, Reggio Emilia y Pikler, que valoran la libertad, el respeto, la autonomía y la conexión emocional como pilares del desarrollo integral.

Aquí, el aprendizaje no se impone, se descubre. Cada día, los niños eligen activamente qué quieren explorar, experimentar y aprender en un ambiente preparado, seguro y amoroso. Las guías —más que maestras— son acompañantes sensibles y observadoras, que facilitan experiencias significativas y respetan los procesos únicos de cada niño.

Creemos en la educación como una experiencia viva, que alimenta no solo la mente, sino también el corazón y el espíritu. Por eso, además de actividades lúdicas y recreativas, los niños viven momentos de introspección, de contacto con la naturaleza y de conexión con ellos mismos y con los demás.

En XimHai, la familia es parte fundamental del camino. Nos apoyamos en una comunidad activa, con espacios de diálogo, escuela para padres, y encuentros que fortalecen el vínculo entre el hogar y el kínder. Juntos, tejemos una red de amor y consciencia para acompañar la infancia como lo que es: el inicio del viaje más importante.